Corona de espinas o Corona de Cristo: Cultivo y cuidado
Esta espinosa planta es procedente de Madagascar, y lleva este nombre por la corona de espinas que se le impuso a Jesucristo antes de la crucifixión.
Esta planta ama el sol, puede crecer como metro y medio, incluso puede usar sus espinas para trepar por otras plantas, y puede florecer durante todo el año. Y aunque sus flores son hermosas, debe tenerse cuidado, pues posee cierto grado de toxicidad, especialmente con animales domésticos, en los humano sólo causa irritación.
La Corona de espinas o Corona de Cristo suele ser usada para tratamiento de enfermedades estomacales.
Cultivo:
La Corona de espinas o Corona de Cristo es muy fácil de sembrar, basta con cortar uno de los tallos o espigas y sembrarlo en una maceta o matera con tierra humedecida, puede combinarse con arena o gravilla o algún sustrato orgánico para facilitar el drenaje.
Cuidados:
Al ser una planta de sol, es necesario que reciba luz solar constante, si la vas a ubicar en interiores, deberá ser junto a una ventana que reciba rayos solares.
El riego puede ser ocasional, ella suele acumular agua en sus tallos y hojas. Es importante que no esté encharcándose o acumulando excesos de agua.
Puede abonarse para que se fortalezcan sus hojas y florezca mucho más.